La situación actual

Ya pasó. En la última reunión de los vecinos, propiciada por la negación a aceptar las cuentas, se volvió ha votar por el tema de la antena. Esta vez salió el vencedora la opción de colocar la antena pero no obtuvo los votos suficientes. Por lo tanto y en vista que Vodafone prefiere no mojarse tampoco y nos en deja libertad con la única premisa de que le devolvamos el dinero que ya había adelantado pues no se va a colocar la antena.
Pero hay algunos detalles a reseñar. Los agitadores en ningún momento se avinieron a dar explicaciones de su postura. En varios momentos y de varias maneras se intentó y toda argumentación era repetida como un mantra: "las antenas son malas", "no tengo porque darte ningún dato", "no necesito aportar más información, todo el mundo sabe que son malas" y así ad infinitum. Evidentemente aquella situación tampoco era cómoda para ellos tanto que adjetivos como linchadores o mentirosos fueron inmediatamente respondidos con un amago de avisar a la ertzaintza. A su vez replicados en base a la existencia de libertad de expresión para todos y el consiguiente tumulto vocal.
De todas las maneras el ambiente ya venia cargado de antes. El comentario en el blog de Magonia había sido localizado días antes por los agitadores. Hasta ese momento ellos parecían sentirse como los únicos y al verse enfrentados se revolvieron para morder. Pero pillaron hueso, incluso en la reunión hubo algún intento por sacar el tema pero volvieron a pinchar.